Impactos geoestratégicos que produce el tráfico y explotación ilícita de coltán (Columbita y Tantalia) en territorio colombiano
Abstract
La explotación ilícita de tantalita y columbita no es un fenómeno nuevo en Colombia, pero sí desconocido por la poca incidencia que ha cobrado o generado en el contexto de “extracción de minerales”; sobre todo porque son el oro y níquel los que cobran mayor significancia. El desconocimiento del fenómeno, en definitiva, es quizá una de las causas de la problemática, no por un ocultamiento como tal, sino porque su ocurrencia pasa en escenarios regionales en los que el hecho se ha dado como desapercibido. Ese escenario, referenciado como ecosistema criminal parcial, está compuesto por dos departamentos en el caso colombiano Vichada y Guainía. El problema de explotación y tráfico de coltán en la frontera que comparten los departamentos mencionados, se ha vuelto poco a poco un foco de crecimiento exponencial, en el cual se incautan cantidades promedio que van desde las dos hasta las siete toneladas por año. El problema viene causando desde 2010 un fenómeno característico: la hibridación de amenazas nacionales e internacionales que, tomando como ventaja la debilidad geopolítica que yace en la porosidad de las fronteras colombianas, trafican columbita y tantalio, provocando así a afectaciones de orden geopolítico, geoestratégico y geoeconómico. (tomado del texto).